La familia está creciendo, hace falta un poco más de volumen interior en el auto y estás pensando en nuevas alternativas para cambiarlo, o tal vez simplemente estás en búsqueda de tu primer auto y quieres una opción espaciosa, sin dejar de lado el rendimiento y el precio. Seguramente un sedán es lo que necesitas.
El sedán es el tipo de auto más común, con 4 puertas y 3 volúmenes bien divididos: el motor, la sección de pasajeros y la maleta, con esta última siempre separada de los asientos. Elige tu auto con estos 5 datos en mente antes de tomar la decisión final.
1) Precio
Los sedanes tienen la ventaja de contar con múltiples modelos distintos, por eso, el valor dependerá totalmente del tipo de auto que desees comprar. De hecho, los precios van desde los $5.990.000 hasta los $21.390.000. Este es el primer factor que debes considerar si buscas un auto familiar: a diferencia del SUV, también de la categoría familiar, el sedán resulta más conveniente en cuanto a precio y prestaciones.
¿Qué presupuesto estás considerando? ¿Qué tipo de prestaciones buscas? Los modelos de marcas emergentes como el JAC J4 o el Greatwall Voleex C30 van desde los $5.990.000 hasta los $7.490.000, ofreciéndote espacio y rendimiento con tecnologías más eficientes. Otra alternativa como el Renault Fluence, que ronda los $13.000.000, combina además diseño con equipamiento interno de alto nivel.
2) Orientado a un público familiar
Cada vez son más integrantes en tu familia, los niños van ocupando mayor espacio y de pronto se han visto en la necesidad de ampliar el espacio del vehículo. La buena noticia es que el mercado ofrece distintos tamaños de sedanes de acuerdo a tus necesidades.
Un Suzuki Swift DZire GA, por ejemplo, tiene una capacidad de 316 litros, mientras que un JAC J4 alcanza los 550 litros. El Renault Symbol, por su parte, es una de las alternativas preferidas por las familias chilenas, al combinar prestaciones para todo tipo de ellas, desde una mayor seguridad para niños pequeños, hasta la incorporación de pantallas touch y control de música para los copilotos más jóvenes.
3) Estabilidad y seguridad
Al tener una menor altura de ruedas y tamaño del chasis, el sedán se vuelve una alternativa más segura que otros autos con el centro de masa más desequilibrado, como un SUV.
El Suzuki Ciaz es un buen ejemplo de un sedán aerodinámico que combina seguridad con un diseño deportivo: con una distancia mínima del suelo de 160 milímetros y una altura de 1,47 metros.
4) Performance/eficiencia
En general, un sedán siempre presentará una relación más equilibrada entre performance y eficiencia, en comparación a otros familiares como un SUV. Precisamente es el motor otro componente importante en la versatilidad de estos autos, con ejemplares de tres, cuatro, cinco, ocho y hasta doce cilindros.
Un SUV tradicional con motor a bencina utilizará un promedio de 10 km/L de combustible en ciudad, mientras que un sedán común como el Suzuki Swift Dzire posee un consumo promedio en ciudad de 14,1 km/L, llegando hasta los 20,7 km/L en carretera.
5) Estilo
El diseño particular del sedán lo hace especialmente adaptable a los distintos gustos de estilo que se busquen. Con los tres cuerpos bien definidos, se puede optar por vehículos que van desde las formas más tradicionales hasta los modelos coupé, que centran su importancia en el diseño, siendo una alternativa más lujosa y con prestaciones deportivas.
Por ejemplo, un estilo sofisticado de sedán con un diseño más premium, es el Mazda 6. Su valor oscila entre los $13.190.000 y los $21.390.000, de acuerdo al tipo de motor y prestaciones que se busquen, aunque todas sus versiones cuentan con seguridad activa y un confort interior propio de los autos de lujo.
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